Empresarios, comerciantes, policías, políticos y funcionarios han hecho uso de ropa blindada ante los niveles de inseguridad y violencia en el país. La tendencia de empresas como “Miguel Caballero” es diseñar prendas que tengan una apariencia ligera y que estén ligadas a la moda. Ropa como trajes, chamarras o abrigos sirven como escudo ante balas. La industria de ropa blindada se está potenciando no solo en México, sino en Latinoamérica de acuerdo a Jorge Servín, director comercial de la marca colombiana.
En una entrevista concedida a Notimex, detalló que su empresa cuenta con variedad de ropa divididas en varias lineas. Desde chalecos antibalas tradicionales hasta ropa interior, en especial playeras diseñadas para proteger a personas que buscan discreción en el uso de este tipo de aditamentos.
Su marca ha vestido a 13 jefes de estado y presidentes, políticos y empresarios que buscan ropa VIP o ejecutiva. “Son prendas de diseñador que se fabrican sobre medida, para el tiempo de clima donde vive el cliente, muy discretas, pero que protegen de disparos de armas de corto alcance”.
Los costos para un escolta van de los 10 mil a 15 mil pesos, prendas especiales para jefes de estado, políticos o empresarios tienen costos de 20 mil hasta 45 mil pesos. “Miguel Caballero” proyecta abrir una planta de ropa blindada en México, ya que el país representa el 30% de sus ventas en el mundo. La empresa está colocada en Colombia, Perú y Costa Rica, opera en 65 países y está entrando al mercado de los Estados Unidos.